FAS vs Águila, un clásico con mal sabor

Por: Irma Alas

El día domingo 22 de octubre, a horas de la tardé, se llevó acabo el clásico de fútbol nacional que los salvadoreños disfrutan ver; la disputa en la cancha entre los equipos FAS y Águila en el estadio Oscar Quiteño de Santa Ana.

Fotografía cortesía de CD FAS

La afición salvadoreña se vio una vez más capturada por la emoción y la incertidumbre que el famoso partido genera entre los amantes de este deporte. La jornada número 12 de la Liga Mayor de Fútbol comenzó con unas palabras alusivas al mes contra el cáncer de mama.

Tanto en el estadio como en sus casas, cada uno de los fanáticos de ambos equipos, tenía altas expectativas para estos, sin embargo, con un empate de 1-1, terminó dejando un mal sabor de boca a la afición. 

Los 11 mejores jugadores de cada grupo salieron a la cancha a defender su bandera y el orgullo de todos los seguidores. La alineación del Águila estuvo compuesta por Rugamas, García, Flores, Trejo, Ramos, Contreras, Umanzor, Dixon, Rodríguez, Acosta y como portero, Benji Villalobos. 

Los rivales del equipo naranja, el CD FAS, estaba dirigidos por Cristian Álvarez y conformado por Coloca, García, Renderos, Santos, Moscoso, Flores, Morán, Aparicio, Castillo, Stradella y Burgos.

El partido inició con mayor posesión del balón por parte de los aguiluchos, mientras que los tigrillos no se movían mucho del medio campo. Cabe aclarar que la cancha parecía un área difícil para los jugadores, ya que las condiciones climáticas eran desfavorables y hacían que la grama se tornara resbaladiza. 

Imagen cortesía de CD Águila

Estas condiciones, dificultaron el desempeño tanto de los tigrillos como de los emplumados, por lo que el juego se vio afectado por varias sanciones de tarjeta amarilla, como Juan Carlos Moscoso, Mejía y García. 

En el segundo tiempo, el duelo prometía más emoción, y esto se cumplió cuando en el minuto 62, David Rugamas anotó el primer gol del encuentro para el Águila, el cual toda la afición celebró con evidente efusión. 

A diez minutos de finalizar la jornada, el Quiteño se dio el honor de celebrar junto a su equipo un gol marcado por una jugada en la banda izquierda de Stradella, quien logró vencer a la defensa migueleña. 

La jornada no tuvo momentos relevantes, y en general, se podría considerar un poco lenta, siendo el segundo tiempo el que tuvo más acción en los minutos que se llevó acabo este. Más que un clásico con goles y ardua batalla, se convirtió en una muestra de pases y posesión del balón, sin concretar nada. Tanto los fanáticos de los aguiluchos como los tigrillos quedaron con un mal sabor de boca.