Nayib Bukele se lleva la manzana con su expulsión del FMLN

Por: Alejandra Paniagua

Un alcalde enamorado de la carta de principios del partido que lo representa es cómo enamorarse de una persona sin conocer sus verdaderas intenciones. En esta escena nacional, tenemos por un lado al pronto ex alcalde de San Salvador, Nayib Bukele y por el otro tenemos a una cúpula gubernamental y responsable del partido FMLN, en medio de ambos se juega una ideología que se debilita por los intereses políticos, económicos y personales del partido gobernante. Es aquí en donde debemos formularnos la siguiente interrogante, ¿La expulsión de Nayib va más allá de llamar a una síndica “BRUJA”? 

Desde el 1ero de Mayo del 2012 Nayib fue presentado como alcalde de Nuevo Cuscatlán, lo que lo catapultaría a una candidatura, 3 años más tarde, para la alcaldía de San Salvador, la cual ganó con una gran ventaja. Solo 3 años le tomaron al empresario izquierdista posicionarse y derrotar a compatriotas que le llevaban años luz de experiencia en política. Al ver los resultados el FMLN vio una oportunidad presidencial para mantenerse como el partido gobernante y acercarse cada vez más a los 20 años de ARENA. Lo que no tenían contemplado era la irreverencia y peculiaridad de Nayib Bukele y cómo su persona resultaba un arma de doble filo.

¿Cómo se volvió Nayib Bukele un político favorito? En mi opinión su buena fortuna en la política tiene mucho que agradecerle a una muy buena estrategia publicitaria y a la juventud. Comenzando que Nayib, representante del partido fundado por Farabundo Martí, dejó el color rojo de un lado y creo su nueva imagen que lo separaba o escondía de su verdadera ideología. En mi opinión, esta estrategia estaba sumamente calculada pensando en una futura separación del partido y así su imagen sería separada automáticamente del partido representante. Otra de sus estrategias fue y es, hablarle a las nuevas generaciones. Enamorar a los jóvenes con ideas utópicas y actitudes rebeldes, como dar una conferencia de prensa con la gorra puesta para atrás, como dar de qué hablar en las plataformas digitales y sociales y como criticar a la cúpula de su propio partido. No cabe duda que el FMLN encendió su estado de alerta y la duda y el arrepentimiento inundaron las sedes del partido. Es aquí en donde inicia la guerra por despojar a Nayib Bukele de su imperio político.

Para Nayib, su alcaldía iba viento en popa y tenía el mismo panorama para su candidatura a la presidencia. La gran interrogante del FMLN pudo haber sido ¿Cómo evitamos una presidencia de Nayib? Y Nayib les contestó por sí solo, con el error que, no sabemos si le costó su puesto en el partido o era lo que en verdad estaba buscando, faltándole el respeto a una síndica del mismo FMLN. Xochitl Marchelli Canales, síndica en la alcaldía de San Salvador fue testigo de la conducta del verdadero Nayib. En una junta la síndica no estaba de acuerdo los acciones que Nayib quería tomar por lo que no voto a favor y cómo resultado fue agredida por el exalcalde, quien le tiró una manzana y le dijo “Llévate la manzana a tu casa, BRUJA”.  Tuvo que suceder un incidente así para que las representantes de la oposición se unieran para luchar ante la agresión del político hacia una mujer, siendo esta del mismo partido.                                                                                                                   El FMLN no tardó en aprovechar la oportunidad que le habían servido en bandeja de plata, por fin deshacerse de su mayor amenaza, Nayib Bukele.                                                                                                             

Como pueblo salvadoreño qué podemos esperar de un representante lleno de egocentrismo, violencia y que no tenga respeto hacia la mujer ni mucho menos hacia sus compañeros y peor aún que sea intolerante a ideas contrarias a las suyas propias. Combinado con este incidente explotó una serie de mensajes agresivos vía Twitter entre Lorena Peña y el entonces aún alcalde de San Salvador. Lo cual lo único que provocó fue engrandecer la brecha entre la cúpula del FMLN y el empresario, buscando cómo solución la renuncia de este o la expulsión como veredicto final de un tribunal.

A pesar de todos los incidentes aún veíamos a un Nayib egocéntrico, orgulloso y quien no aceptaba su falta de respeto en ningún aspecto. Un Nayib que seguía criticando a los políticos del FMLN y los tachaba de corruptos, un Nayib que decía estar enamorado de la carta de principios del partido de Farabundo Martí, un Nayib que no se iba a dar por vencido tras su expulsión del partido, un Nayib decidido a buscar la presidencia de El Salvador y a la vez de hundir a sus “ex compañeros”. 

Después de días de especulación Nayib subió un video en vivo en su cuenta de Facebook con título “La decisión” (Definitivamente el ex militante del FMLN vio la serie “House of Cards”). “La decisión” era la respuesta a todas aquellas especulaciones, hizo público su lanzamiento para la candidatura de El Salvador, hizo público la formación de un nuevo partido o movimiento que lo llevaría a ser un contrincante para ARENA.   Luego de lanzar la “bomba” Nayib no estaba totalmente satisfecho y como un niño chiquito y berrinchudo se moría por señalar en un programa en vivo, a Eugenio Chicas como violador de una menor, quien de remate era su hija de crianza.                            

En un Tweet Nayib escribió “Si se meten con la memoria de mi padre arderá Troya” y podemos ver que ya tiró el primer fósforo.

Finalizamos con las interrogantes ¿Podrá Nayib movilizar a millones de “golondrinas” para ganar la presidencia de El Salvador? ¿1 año y medio será suficiente para realizar todos los procesos de inscripción? Lo que sí sabemos es que nos espera mucho circo para el pueblo salvadoreño.